Ciudad de Buenos Aires, Noviembre 2006
Ante el conflicto argentino-uruguayo por la instalación de pasteras de celulosa
DECLARACIÓN DEL CONSEJO CONSULTIVO DE RESIDENTES URUGUAYOS EN ARGENTINA
Los pueblos de América del Sur están íntimamente unidos por vínculos de naturaleza e intereses recíprocos”
José Gervasio Artigas
La instalación de plantas de celulosa –y decimos bien, celulosa y no papelera- en la ciudad de Fray Bentos, sobre el lecho del Río Uruguay, se ha transformado en un conflicto rioplatense, entre nuestro Uruguay y Argentina, y crece a contrapelo del mejor momento que debería tener la integración regional.
Contraponer desarrollo económico con cuidado del ecosistema, es una de las falacias que nos han impuesto en distintos foros mundiales. En esta controversia en torno a la planta de celulosa que se está instalando en Fray Bentos, lentamente estamos comenzando a desdibujarnos como países hermanos. De un lado del río se habla de ecología, del otro, de terminar con la desocupación. Y en ambos casos hay quienes están atizando el fuego del chovinismo.
No es tarde todavía para que recordemos que los países ricos fueron hábiles en explotar las pequeñas diferencias que a veces solemos tener.
Hoy, cuando los pueblos latinoamericanos comienzan a mirarse a si mismos como hermanos, en un momento en que se comienza a hablar seriamente de integración latinoamericana, y cuando varios países encaran políticas independientes, este conflicto debe terminar en un acuerdo de partes sin perjuicio para ambos pueblos.
Uruguayos y argentinos no podemos permitirnos que nos vuelvan a separar como en el siglo XIX.
Caer en el terreno de la división sería hacerle el juego a intereses mezquinos de los que históricamente utilizaron los conflictos regionales para saquear nuestra América Latina.
Uruguay y Argentina vienen de luchas libertarias conjuntas que parieron sus independencias, tienen en sus enseñas patrias los mismos colores y el mismo sol. La Provincia de Entre Ríos –donde el conflicto adquiere mayor dimensión- tiene la bandera de franjas y diagonal con los mismos colores del blasón de nuestro prócer Artigas.
Ante la intervención del rey Juan Carlos de Borbón en la instancia que les toca vivir a nuestros pueblos, expresamos nuestro deseo de que su gestión permita generar un ambiente de entendimiento y diálogo que desemboque en un acuerdo favorable para todos.
Toda acción que facilite el entendimiento mutuo y rescate lo mejor de nuestras tradiciones de hermandad, contará con nuestro firme apoyo.
Mas que nunca recordemos las palabras de Artigas que encabezan esta declaración.
Ante el conflicto argentino-uruguayo por la instalación de pasteras de celulosa
DECLARACIÓN DEL CONSEJO CONSULTIVO DE RESIDENTES URUGUAYOS EN ARGENTINA
Los pueblos de América del Sur están íntimamente unidos por vínculos de naturaleza e intereses recíprocos”
José Gervasio Artigas
La instalación de plantas de celulosa –y decimos bien, celulosa y no papelera- en la ciudad de Fray Bentos, sobre el lecho del Río Uruguay, se ha transformado en un conflicto rioplatense, entre nuestro Uruguay y Argentina, y crece a contrapelo del mejor momento que debería tener la integración regional.
Contraponer desarrollo económico con cuidado del ecosistema, es una de las falacias que nos han impuesto en distintos foros mundiales. En esta controversia en torno a la planta de celulosa que se está instalando en Fray Bentos, lentamente estamos comenzando a desdibujarnos como países hermanos. De un lado del río se habla de ecología, del otro, de terminar con la desocupación. Y en ambos casos hay quienes están atizando el fuego del chovinismo.
No es tarde todavía para que recordemos que los países ricos fueron hábiles en explotar las pequeñas diferencias que a veces solemos tener.
Hoy, cuando los pueblos latinoamericanos comienzan a mirarse a si mismos como hermanos, en un momento en que se comienza a hablar seriamente de integración latinoamericana, y cuando varios países encaran políticas independientes, este conflicto debe terminar en un acuerdo de partes sin perjuicio para ambos pueblos.
Uruguayos y argentinos no podemos permitirnos que nos vuelvan a separar como en el siglo XIX.
Caer en el terreno de la división sería hacerle el juego a intereses mezquinos de los que históricamente utilizaron los conflictos regionales para saquear nuestra América Latina.
Uruguay y Argentina vienen de luchas libertarias conjuntas que parieron sus independencias, tienen en sus enseñas patrias los mismos colores y el mismo sol. La Provincia de Entre Ríos –donde el conflicto adquiere mayor dimensión- tiene la bandera de franjas y diagonal con los mismos colores del blasón de nuestro prócer Artigas.
Ante la intervención del rey Juan Carlos de Borbón en la instancia que les toca vivir a nuestros pueblos, expresamos nuestro deseo de que su gestión permita generar un ambiente de entendimiento y diálogo que desemboque en un acuerdo favorable para todos.
Toda acción que facilite el entendimiento mutuo y rescate lo mejor de nuestras tradiciones de hermandad, contará con nuestro firme apoyo.
Mas que nunca recordemos las palabras de Artigas que encabezan esta declaración.
Consejo Consultivo de Residentes Uruguayos en Argentina
25 de noviembre de 2006